Burning es sin duda una de las bandas más legendarias de la historia del Rock en España. Su actitud, chulería y autenticidad han marcado una longeva trayectoria, llena de altibajos y contratiempos, en la que se han mantenido siempre fieles a su propio estilo. Burning ha sido una banda de referencia para varias generaciones en las últimas décadas (Loquillo y Trogloditas, Gabinete Caligari, Ramoncín, Pereza,...).
Su estilo y su música están claramente influidos por los Rolling Stones, pero también por el rock callejero de Lou Reed y, sobre todo en sus primeros tiempos, por el Glam de New York Dolls. Adaptaron como nadie el rock anglosajón al castellano, aportándole su estilo macarra y castizo, creando así una identidad propia. Su música combina el rock enérgico con emotivas baladas cargadas de melancolía. Sus canciones giran en torno a los tópicos del rock and roll (chicas, fiestas, noches de alcohol) y también a temas marginales (historias de los suburbios, delincuentes callejeros, drogas, prostitución).
El grupo nace en 1974 en el barrio madrileño de La Elipa, donde la afición a los Rolling Stones, Deep Purple, y otros grupos representativos del rock anglosajón, une a Quique Pérez (bajo), Johnny Cifuentes (piano), Pepe Risi (guitarra) y Toño Martín (voz) con la idea de tener un grupo de rock y tocar en garitos. El intenso calor que hacía el día que bautizaron al grupo fue lo que decidió su nombre.
Desde las primeras actuaciones se pudo comprobar el innegable carisma y especial estilo de Toño como cantante, a imagen y semejanza de Mick Jagger, pero con el toque cheli y canalla que el grupo ha mantenido a lo largo de su carrera.
Igualmente llama la atención Pepe Risi, autor de la mayoría de las canciones (junto a Toño, mientras éste permaneció en el grupo), y de unos riffs heredados de Keith Richards y Chuck Berry. Su pose, con gafas de sol, chupa de cuero y su Gibson Les Paul "negrita", es ya un icono de la historia del rock en España.
El piano de Johnny es el tercer pilar sobre el que se sustenta el sonido del grupo a lo largo de su historia.
En 1974 graban su primer single: "I´m burning" (Movieplay, 1974), compuesto por el dúo Toño-Risi y cantado en un inglés de barrio, con un sonido muy glam, en el que mezclan influencias de Marc Bolan y New York Dolls. En la cara B graban una versión de "Johnny B. Goode", de Chuck Berry, que posteriormente nunca faltará en los conciertos del grupo.
Su segundo single se publica en 1975: "Like a Shot" (Movieplay, 1975), con "Rock and Roll" en la cara B. Estas canciones, compuestas por el dúo Toño-Risi y cantadas en inglés, se acercan más al Rock clásico con un sonido sucio que luego sería su seña de identidad.
Son unos primeros momentos llenos de dificultades: la censura impide la publicación de su LP "Sólo para mujeres"; no encuentran batería estable; y Risi tiene que cumplir el servicio militar. Aún así consiguen forjarse a base de directos llegando a actuar en el famoso Festival de la Cochambre celebrado en Burgos en 1975.
En 1978 consiguen grabar su primer LP: "Madrid" (Ocre, 1978). Esta vez en castellano, cuentan historias de la calle, de su propio barrio. Su sonido se asemeja al rock and roll stoniano, guitarrero ("Madrid", "Jim Dinamita", "Miéntelas") combinado con estremecedoras baladas ("Lujuria", "Sin tiempo para vivir") interpretadas magistralmente por Toño. Por fin los grupos empezaban a contar en castellano historias propias, reales, la verdadera realidad social. Burning fue uno de los primeros grupos en formar parte del movimiento del Rock Urbano (junto con Leño, Ramoncín, Cucharada,...).
"El Fin de la Década" (Ocre, 1979) supuso la continuación de la propuesta musical de su primer disco. La inclusión de la canción "¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?" en la película de Fernando Colomo del mismo título (1980) y la aparición del grupo en la película, supuso un importante espaldarazo de popularidad al que también contribuyó la inmensa calidad del disco. Además de la citada canción, contiene otro de los grandes clásicos de la banda: "Mueve tus caderas", y otras muestras de rock demoledor ("Seducción", "Puedes sentirlo"), medios tiempos ("Un poquito nada más", "Bajo los focos") y baladas magistrales convertidas también en clásicos del grupo ("Balada para una viuda", "Las chicas del Drugstore").
La trilogía se completa con "Bulevar" (Ocre, 1980) en la línea de sus predecesores, aunque con un sonido algo más pop, pero manteniendo la temática y el estilo del grupo. Este disco añade a la colección de clásicos del grupo varias canciones: "No es extraño que tú estés loca por mí", "Es Decisión" (cantada por Risi) o las maravillosas baladas "Días de lluvia" o "Escríbelo con Sangre". Varias de las canciones se incluyeron en la banda sonora de la película "Navajeros" (Eloy de la Iglesia, 1980) basada en la vida del delincuente callejero El Jaro.
Con este disco se pone fin a la época gloriosa del grupo y a partir de aquí comienzan los problemas: Quique abandona la banda; a Toño le empiezan a pasar factura los excesos con las drogas y, como consecuencia, las relaciones personales con el resto del grupo se deterioran. Toño se mueve ahora entre la vida salvaje del rock and roll y la vida familiar junto a su mujer y su hija, con lo que se le hace difícil compaginar ensayos, conciertos, etc. En 1982 se publica "Atrapado en el amor" (Belter, 1982), un disco introspectivo que se aleja del rock rotundo de los anteriores discos. Refleja una mirada dramática de la vida, repleto de baladas de aire romántico cuyo sonido está definitivamente influido por las circunstancias que rodean ahora al grupo, sobre todo a Toño. Se incluyen algunas joyas como "Chica de moda" o "Hermano".
Tras la grabación del disco Toño abandona el grupo para intentar llevar una vida familiar junto a su mujer y su hija, y alejarse de la vida nocturna y las drogas. Algo que no pudo conseguir definitivamente. Tras varios años viviendo con su familia en el pueblo burgalés de Briviesca, los problemas personales provocan su marcha a Barcelona, donde definitivamente vuelve a quedar atrapado por las drogas, los excesos y la vida nocturna. Murió el 9 de mayo de 1991, alejado del mundo de la música y víctima de su estilo de vida.
A pesar de las dificultades Johnny y Risi deciden apostar por la continuación de Burning y dan un giro hacia el rock and roll de sus primeros tiempos con la grabación de "Noches de Rock and Roll" (Belter, 1984). Johnny y Risi se reparten la función de cantantes y retoman la vena roquera ("Esto es un atraco", "Cristina", "Nena"), sin olvidar las baladas nocturnas, como "El sueño de tu sonrisa" o "Una noche sin ti", dedicada a Toño.
A pesar de no contar con el reconocimiento de la crítica ni del público masivo, poseen ya un público fiel y cierto reconocimiento por parte de algunos de los grupos de rock de la época como Loquillo o Ramoncín, con el que Risi colabora en 1984 para escribir "La chica de la puerta 16".
A partir de aquí Burning continúa su camino al margen de las modas y los criterios de la industria discográfica, apoyándose en sus principios de fidelidad al rock and roll. Siguen recorriendo el país dando conciertos en los que demuestran noche tras noche su pasión por el rock y la auténtica dimensión del grupo.
Los siguientes trabajos son la continuación del estilo Burning, con algunos altibajos pero siempre inundados del espíritu del rock and roll auténtico, hecho con el corazón. En 1985 "Hazme Gritar" (Victoria, 1985) deja varias muestras de calidad: "Tú y yo", "Dieron las diez", "No pares de gritar", aunque en general el sonido pierde algo de agresividad, sobre todo en la guitarra. En 1987 se publica "Cuchillo" (Victoria, 1987) cuya producción sigue sin hacer justicia al grupo pero donde destacan algunas piezas como "Muévete en la oscuridad", "Chueca" y "Ginebra Seca". Con "Regalos para mamá" (Victoria, 1989) mejora el sonido de la guitarra, recuperando la fuerza de "Noches de Rock and Roll", y continúan aportando clásicos al repertorio de la banda: "Golpéales" y, sobre todo, la balada "Como un huracán".
Al año siguiente graban su disco "En Directo" (Ariola, 1990) donde por fin se puede apreciar lo que el grupo es capaz de demostrar sobre un escenario. El disco goza de cierta popularidad y sus ventas no son exorbitantes pero permiten al grupo hacer conciertos en estadios y pabellones. El capricho de la industria musical hace que de nuevo salgan en los medios y suenen en las radios del país. Además el sonido del disco por fin les hace justicia, y para la grabación les acompañan algunos amigos: Miguel Ríos, Loquillo, Antonio Vega, Sabina, Rosendo y Los secretos.
Tras el apogeo del directo y de la extensa gira por toda España, llega la vuelta a la cruda realidad. Al igual que sucedió con otros grupos españoles de los setenta y ochenta, con la llegada de las nuevas generaciones de grupos, son olvidados por los medios y la industria, y son relegados a un segundo plano. Burning vuelve al underground, tocando en pequeños garitos y sobreviviendo con dignidad; son conscientes de que cada disco supone empezar de cero. A ellos sólo les interesa seguir disfrutando del Rock and Roll, así que en 1993 graban "No mires atrás" (Don Lucena, 1993), un disco que está a la altura de los mejores de su carrera. Destacan "Weekend", o las emocionantes "Te quiero tanto" y "Ojos de ladrón". El disco está dedicado a la memoria de Toño, que había fallecido dos años antes.
Risi participa en 1997 en el disco en directo "Compañeros de Viaje" (EMI, 1997) de Loquillo y Trogloditas, en el que el cantante versiona algunos clásicos del rock nacional junto a sus autores. La canción elegida es "¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?".
La nueva etapa de Burning se ve truncada el nueve de mayo de 1997 por la muerte de Pepe Risi a causa de una neumonía. Fallece uno de los músicos más emblemáticos de la historia del Rock en España. Johnny decide entonces que Burning debe continuar y toma las riendas del grupo, formado entonces por Carlos Guardado al bajo (en Burning desde 1987), Eduardo Pinilla a la guitarra (desde 1992) y una nueva incorporación: Kacho Casal en la batería.
Poco después de la muerte de Risi se publica "Banquete para ellos" (No tomorrow, 1997). Un disco tributo a la música de Burning que, curiosamente, se había empezado a gestar antes de la muerte de Risi. De hecho Johnny y el propio Risi colaboraron en la versión de "Las chicas del drugstore" realizada por Una Sonrisa Terrible. Participan, entre otros, Nuevo Catecismo Católico, Aerobitch, Neverly Brothers o Sabino Méndez.
Los días 11 y 12 de diciembre de 1997 se organiza en Madrid un concierto homenaje a Pepe Risi, en el que además de Burning, participan numerosos grupos versionando sus canciones (Loquillo, Gabinete Caligari, Ramoncín, Carlos Segarra, M-Clan, Los Enemigos, etc.). El concierto se publica bajo el título de "Una noche sin ti" (Columbia, 1998).
Al año siguiente Burning publica un nuevo disco con las canciones que había dejado grabadas Pepe Risi. El disco es "Sin miedo a perder" (Surco, 1998), en el destacan "Estrella Fugaz" o "Jack Gasolina". Risi dejó más canciones grabadas; dos de ellas las graba Loquillo en su disco "Cuero Español" (EMI, 2000): "Quiero Acariciar el Rock and Roll" y "La sonrisa de Risi".
El grupo continúa, allá por donde va, dando lecciones magistrales de Rock and Roll sobre un escenario. Su empeño y constancia les hacen no mirar al pasado y enfrentarse a cada concierto como si fuera el último, rodando por todos los rincones de España, tocando por pequeños bares en ciudades y pueblos perdidos por la geografía nacional.
"Altura" (Avispa, 2002) es el primer disco de estudio sin Pepe Risi y con la nueva formación siguen destilando auténtico Rock and Roll sucio y macarra. Evidentemente los tiempos gloriosos ya están muy lejanos y las canciones no están a la altura de las de sus primeros discos, con ese sabor especial, pero siguen saliendo pequeñas joyas como "Desde el pantano". El grupo participa en el disco homenaje a Barricada "Un camino de piedras" (DRO, 2003) con la canción "Pídemelo otra vez".
Siguen las extensas giras por todo el país y en 2005 graban un disco revisando dieciséis temas clásicos del grupo en formato acústico: "Dulces dieciséis" (Music Bus, 2005). Una mirada inédita al rock de Burning, pero con un resultado excelente. Cuentan con la colaboración de músicos como Quique González, Ñaco Goñi o Tito Dávila. La gira posterior, tocando en formato acústico por pequeñas salas y teatros, es todo un éxito. Su concierto en la sala Joy Eslava de Madrid es publicado en el año 2008: "Desnudo en el Joy" (Warner, 2008), reflejando fielmente la calidez de los conciertos y el buen hacer de los músicos.
Johnny es requerido en los últimos años para tocar en conciertos junto a Jaime Urrutia, Loquillo, o participar en discos junto a Pereza o La Frontera.
Burning no fue nunca un grupo con gran éxito comercial, ni llenó estadios, pero el rock de este país tiene una deuda con él. Parte de la escena rockera española ha reconocido abiertamente su influencia, y a pesar de no sonar en las radios comerciales, ni disfrutar del éxito masivo de crítica y público, ha seguido siempre su camino al margen de modas, coherente con sus principios, fiel a su estilo y a su corazón. Actualmente Burning sigue ofreciendo noches memorables de Rock and Roll y dejando un legado difícil de igualar.