DEEP PURPLE - MADE IN JAPAN (1972)

¿El disco en directo más famoso de la historia del rock? Probablemente. Grabado entre Tokio y Osaka en 1972, en la gira del disco "Machine Head", este doble directo  constituye la muestra perfecta del auténtico sonido "Made in Deep Purple", que no habían conseguido plasmar en ninguno de sus discos de estudio anteriores.

El grupo se encuentra en el mejor momento de su carrera, con su formación más legendaria (Ian Gillan - voz, Roger Glover - bajo, John Lord - teclados, Ian Paice - batería, Ritchie Blackmore - guitarra). La guitarra de Blackmore y el teclado de Lord se compenetran a la perfección, consiguiendo un sonido atronador y demostrando su virtuosismo en varios momentos del disco. La voz de Gillan es un alarde de destreza (inolvidables el duelo con la guitarra en "Strange Kind of Woman", y los increíbles agudos que alcanza en "Child in Time"). Si a esto le añadimos una sección rítmica tremendamente sólida y efectiva, nos encontramos a una banda en auténtico estado de gracia.

El comienzo del disco con "Highway Star" es demoledor, y el solo de guitarra de Blackmore es ya un clásico. La fuerza de temas como "Space Truckin´" se combina con la delicadeza y los cambios de intensidad de "Child in Time", el toque blues de "Lazy" y el ritmo pegadizo de "Strange Kind Of Woman". Ian Paice tiene su momento de gloria en el solo de batería de "The Mule". El disco se completa con el clásico de los clásicos, la canción más legendaria de Deep Purple, el riff de guitarra más tocado de la historia, una canción que forma parte la memoria colectiva de todos los aficionados a la música rock: "Smoke on the water". Seguramente esta canción haya sido la causante del estatus de "histórico" que ha alcanzado este disco.

Como buen grupo de rock progresivo algunos temas se alargan de manera casi exagerada, incluyendo solos, improvisaciones y demostraciones de virtuosismo de todos los componentes del grupo.

Con motivo del 25 aniversario de su publicación se editó un doble CD que contenía el disco original remasterizado y varios temas extra grabados en estos mismos conciertos, aunque, para ser sincero, yo prefiero seguir escuchando el fantástico sonido del vinilo.

Las siete canciones de este álbum conforman una obra maestra difícil de igualar. Es una pena que los que hemos visto a Deep Purple en sus últimas giras por España hayamos tenido que volver a oír este disco para recordar la grandeza de esta banda que puso los cimientos del Heavy Metal y que forma parte de la leyenda del rock de todos los tiempos.